Mientras haya esperanza habrá vida. La persona deja de vivir en el momento en que cae en el desánimo y en la melancolía.
La peor muerte no es la física sino la espiritual, cuando la persona ya no cree ni siquiera en sí misma. No voy a decir nada más, sólo recordar lo que vi escrito en una tarjetica:
«La persona se vuelve más vieja cuando los remordimientos y las amarguras ocupan el lugar de los sueños».
NUNCA ES TARDE
Para recomenzar una nueva vida
Padre Juca